El joven McLaren, piloto de Cooper, ganó la carrera inaugural disputada en Argentina. Moss en un Lotus privado consiguió una brillante victoria, bajo la lluvia, en Mónaco.
Y las siguientes 5 carreras fueron un paseo militar para Brabham, que le valdrían para conseguir su segundo título consecutivo de Campeón del Mundo.
Cooper también consigue su segunda Copa de Constructores consecutiva en la temporada del adiós de los motores de 2,5 litros.
Brabham y Cooper en Silverstone - 1960
En Ferrari todo era optimismo, ya que se habían sabido adaptar y, también, a partir de ese año competirían con el motor en la parte trasera. Los pilotos de Ferrari eran los estadounidenses Phil Hill y Richie Ginther y el carismático germano Wolfgang von Trips, que perecería en Monza en el transcurso del GP de Italia y que arruinó la fantástica temporada de la Scuderia, que conseguiría el título de pilotos con Phil Hill y el de constructores.
Después del éxito del año anterior, la historia cambió completamente en 1962 para Ferrari. Con problemas políticos internos que explotaron en una rebelión y en despidos masivos de ingenieros y personal técnico, tuvieron que participar con los mismos autos de 1961 con algunos retoques.
Mientras tanto, sus rivales británicos y alemanes habían trabajado duro para ser más competitivos en materia técnica y humana. Para Porsche conducían Dan Gurney y Jo Bonnier. En Lotus estaban Trevor Taylor y Jimmy Clark, para el que Chapman había creado el Type 25 usando un chasis monocasco con el que se conseguía mayor rigidez y una reducción de peso considerable. BRM tenía a Graham Hill y Richie Ginther. Mientras que para Cooper pilotaban Bruce McLaren y Tony Maggs. Brabham, que había dejado Cooper, trabajaba duro para hacer debutar sus propios autos una vez comenzada la temporada.
Graham Hill en su BRM
El de este año fue un campeonato disputadísimo, en el que Hill y Clark llegaron a la última carrera sin saber quién se llevaría el gato al agua.
A los 33 años, después de 6 años en las carreras y sólo 9 años con carnet de conducir, Graham Hill se convierte en el nuevo Campeón del Mundo, uno de los más populares campeones ingleses. Comenzando como mecánico y ganando 1 libra al día, llegó a la cima del mundo automovilístico.
Las siguientes posiciones en la clasificación de pilotos fueron para Jim Clark, Bruce McLaren y John Surtees (que participaba con un Lola), todos ellos grandes nombres en la historia de la F1. La Copa de Constructores fue para BRM.